En defensa de lo mejor de occidente

Los verdaderos occidentales siempre estuvieron con los cientificistas y racionalistas, no con los nazis. Esa es la afirmación fundamental de este blog, antes que nada, me gustaría recalcar que esa frase es parcialmente verdadera debido a que existen influencias reales de la filosofía platónica y neoplatónica en el pensamiento de Hitler, aquí únicamente me interesa la crítica activa de los que se hacen llamar “conservadores occidentales” como ya he hecho en este blog con sus posiciones biológicas, teológicas, filosóficas, antropológicas y neurológicas, hoy le toca lugar a la historia de la sociedad occidental, no la historia de los cristos resucitados sino la verdadera historia, la de los filósofos griegos y los modernos racionalistas que empezaron con René Descartes, una defensa abierta a la civilización, filosofía y ciencia occidental que tanto han sido atacadas por filósofos irracionalistas, en definitiva quizás termine por defender una visión sesgada de un occidente idealizado debido a que la difusión cultural existió en la antigua grecia mucho antes que el cristianismo y muchos filósofos tomaron ideas prestadas de los orientales. En definitiva, lo que quiero hoy es sencillamente defender el verdadero occidente, o si no se puede, el occidente que merece reivindicación, el occidente de Galileo, de Russell, de Mill, de Aristóteles, de Pasteur, de Spinoza, de Newton, de Descartes (quien se sospecha se vio obligado a afirmar su creencia dualista respecto de la mente debido a creencias religiosas), de la secularización, de la racionalidad, del humanismo, del respeto al otro, de las libertades individuales, vengo a defender su cara que creo yo reivindica a la mejor parte de la humanidad, la cara de occidente que le dio a los hombres la esperanza de la paz por la guerra, la veracidad por la mentira, la duda por el dogma y la fe, la razón por el dogma, la secularización y la libertad de culto por el estatismo religioso obligatorio. Ese occidente digno de cuento de hadas que mantuvo el progreso, cuya fe en la razón (si se me permite la frase) ha iluminado las mejores mentes del mundo y ha salvado miles de vidas, ese occidente que está siendo atacado por sus mismos defensores que enarbolan banderas nacionalsocialistas, banderas de eclesiásticas, las banderas de quienes han perturbado su hermoso y bello avance, lo mejor de la humanidad parece haber hallado un gran enemigo en sus partes más primitivas que hoy afirman la búsqueda de su defensa desde la biología más falsa (en este blog ya se han señalado varias deficiencias en esta área), la pseudociencia y la falta de espíritu crítico, del realismo científico critico que ha sido patente de nuestras más grandes mentes. Estamos ante un periodo de crisis, no porque la razón esté en decadencia, sino porque sus propios enemigos se han dado cuenta que su gran valor para la humanidad actual, por ello intentan destruirla desde adentro, por eso la razón y la ciencia han encontrado enemigos, por lo menos en lo que al ambiente del hombre común respecta, en sus mismos aliados.

La mayoría de quienes intentar defender occidente, siendo antítesis ideológicas como históricas de este, suelen ser conservadores cristianos que pueden defender dogmas anti-científicos debido a interpretaciones muy literales de la Biblia además de defensores acérrimos de la familia sobre el marxismo cultural (esto no va a volver a ser mencionado en el blog, sencillamente he encontrado curioso que los cristianos más fanáticos sean defensores de la familia, la lectura de las enseñanzas de Cristo acerca de los padres, los hijos y los hermanos parece que nunca llegó a oídos de estos señores). Primero he de afirmar que el cristianismo tiene fuertes influencias de la cultura oriental, en Oriente se era muy acostumbrado el hecho de transmitir fundamentalismos religiosos mediante la escritura, mientras que en la antigua Grecia si bien las novelas épicas de Homero eran bien tenidas en cuenta no eran considerados libros sagrados, de hecho, las sociedades griegas eran mucho más laxas en su religión que en muchos otros casos posteriores. Las raíces mismas del cristianismo tienen lugar en Antioquía, África donde se construyó el primer templo cristiano y se formó Pablo, el creador intelectual y transformador del cristianismo en una jerarquía bien organizada (recordemos que Jesús creía en la llegada del fin del mundo por lo que era más un reformista del judaísmo que atacaba el legalismo y ritualismo obsesivo del clero antes que alguien que quería fundar una nueva religión a largo plazo, además me gustaría aclarar que el crimen de los judíos de elegir a Barrabas es poco plausible, debido a que no se tenía la costumbre de escuchar al pueblo ni menos aún de hablar con los presos, esto fue un invento posterior de la Iglesia para lavarle las manos a el estado romano mientras que atacaba a los judíos) la raíz griega del cristianismo no está en el mismo Jesús que no poseía la formación ni nadie de su ambienta hubiera sido capaz de explicársela, esta raíz existe en los judeocristianos de la diáspora, si alguien tiene alguna duda puede consultar Heh. 11, 26 “Los discípulos fueron llamados cristianos primeramente en Antioquía”, incluso las mayores influencias filosóficas del judeocristianismo fueron esencialmente no occidentales, los egipcios Filón y Plotino. El mito del Dios nacido  de una madre virgen se remonta a algunos pueblos primitivos que no relacionaban el embarazo con el acto sexual, el mito de la virgen fecundada es común a las religiones paganas del antiguo Egipto donde se creía que el Faraón era milagrosamente engendrado en la reina virgen por el dios Amon-Ra, Krishna el redentor hindú nació de la virgen Devanaguy. Maya, la madre de Buda, también habría tenido a su hijo sin necesidad de relaciones. La madre de Mitra, un Dios persa, lo mismo, Perseo también nació de parto virginal, Horus, Rómulo, Zaratustra, Atis, Lao Tse y me dejo algunos. Tampoco hay que ignorar el mitraísmo donde había bautismo, comunión, ayunos, sus fieles se llamaban “hermanos”, los sacerdotes eran célibes y sus reglas morales eran similares a las cristianas, este culto fue exterminado por el imperio romano una vez convertido al catolicismo y San Agustín lo criticó como “engaño del Diablo” cuando se enteró de su existencia.

Por ende, la raíz de los occidentales no es cristiana debido a que el cristianismo tiene raíces en la religión judía, en la mitología egipcia, en el paganismo grecorromano y en la filosofía helénica, el cristianismo no es más que un agregado tardío a una civilización occidental antecedente que ni siquiera es exclusivamente occidental, como ningún occidental ha sido desde los primeros viajes a Oriente por lo que alguien estrictamente occidentalista incluso vería mal al cristianismo debido a su tendencia a mancillar las grandes filosofías organizadas durante la edad griega y por haber sometido a la humanidad a una razón sometida a la fe y cierva de ésta en lugar de los mejores años griegos, sometiendo a la cultura occidental a un periodo oscuro mientras que los árabes y musulmanes vivían una época de esplendor científico que fue derrumbada por las teocracias de su religión que hasta hoy perdura en el asesinato y persecución a cristianos y cualquiera que no sea de su religión.

Respecto ahora a la occidentalidad del pensamiento de Hitler cabría recordar que uno de sus filósofos de influencia el irracionalista que creía en fantasmas Arthur Schopenhauer que también favoreció el pensamiento oriental diciendo que sin el conocimiento de los “Upanishads” nunca hubiera llegado a su propio pensamiento e incluso el mismo Schopenhauer planteó un cristianismo ario originado en la India (de nuevo a Schopy no parecen favorecerlo las evidencias arqueológicas y las reconstrucciones históricas), Hitler asimiló dicho orientalismo de Schopenhauer y de Wagner al punto que vio en la India un aliado y era un ávido lector de “Bhagavad Gita” por lo que no se puede hablar de una filosofía occidental en Hitler, principalmente debido a que el pensamiento irracionalista y despótico hitleriano hubiese sido rechazado por los héroes de la ilustración aunque quizás hubiese sido reivindicado por algunos griegos los cuales ya habían sido superados por el pensamiento occidental.

Occidente es la cuna de Voltaire, del método, de los filósofos cientificistas, de la racionalidad y de la duda metódica, quién sea que afirme algo sin ponerlo a prueba mediante el método racio-empírico y científico, quien no dude metódicamente de lo que se debe dudar como en fuentes de dudosa veracidad o faltas de pruebas (los estoy mirando negacionistas del holocausto) quien reivindique la intolerancia religiosa, sexual y étnica, quien reivindique el militarismo, no estará de la mano de la sociedad occidental quien ha sido el frente de batalla contra el irracionalismo de todas las épocas que ha encontrado aliados poderosos en oriente, hoy en día, la defensa de la sociedad occidental verdadera o por lo menos lo mejor de ésta solo puede seguir la secularización del estado como sucedía en la antigua grecia y como se defendió desde la ilustración, la cientificidad y razón del método y la utilización de políticas basadas en ciencias, estas filosofías fueron formadas única y exclusivamente en occidente hasta la occidentalización de algunos países orientales mientras que el irracionalismo, el militarismo, el conservadurismo y demás males de nuestra especie han sido defendidas por todas las culturas en algún punto, por ello, por la defensa de lo mejor de occidente es que debemos proteger sus rarezas que han ayudado al bienestar general de los individuos y de la humanidad. Por más occidentalización si es necesaria, pero es injusto de mi parte atribuirle el racionalismo únicamente a occidente, es cierta esa crítica posible, pero también es cierto que occidente jugó el papel privilegiado en esto y le debemos buena parte del mérito junto a los judíos que se habían occidentalizado y olvidado su ortodoxia (hasta que Hitler y los musulmanes los inestabilizaron tanto que tuvieron que volver a la ortodoxia y la guerra) por lo que su defensa frente a las tradiciones occidentalistas-orientalistas que se ponen en el hombro el bien de nuestra cultura deben ser criticadas con toda la vehemencia posible, espero que ese sea el mensaje que les haya llegado.