Hoy vengo con una crítica a la escuela de Chicago de
economía y sobre todo a Milton Friedman, cualquiera que sepa de estos temas
sabrá la cantidad de críticas a los reaccionarios del método científico de la
escuela austriaca de parte de la totalidad de los economistas, hasta hay un
blog en internet de divulgación económica destinado a criticarlos (link aquí).
El problema es que la escuela de Chicago no ha recibido las suficientes
críticas así que muchos de las personas que no han caído en las mentiras de los
austriacos pero caen en la “ciencia” económica de Milton Friedman. Hoy pasaré a
criticar los supuestos metodológicos de esta doctrina, sobre todo sus
inconcordancias con la psicología y algunos de sus errores respecto de economía
aunque no conozco tanto esta materia. Antes de empezar quiero decir que la
inconcordancia con ciencias en las que se comparte un objeto de estudio y sobre
todo la falta de concordancia con las leyes más establecidas de estas ciencias
es un claro ejemplo de falta de cientificidad, por lo que a priori los errores
tan grosos de esta teoría en psicología y explicación de la conducta humana
deberían ser tomados muy en cuenta y no ser agarrados y escupidos como si fuera
poca cosa (curioso que si una ley química viola una ley física es totalmente
cuestionada mientras que si pasa lo mismo con economía y psicología no se tome
tan en cuenta, esto tiene que ver con el nivel de fanatizacion ideológica a
donde son capaces de llegar los defensores de ciertas corrientes económicas)
El principal y más abierto error a la crítica es la hipótesis
de Friedman (seguido por el economista argentino tan de moda José Luis Espert
en su libro “La Argentina devorada” P. 398) donde se mantiene que un supuesto
será aceptado si no es contradicho por la evidencia empírica y no por su valor
de verdad, esta hipótesis es, para cualquiera que sepa de lógica básica, falsa y
regresiva a todas luces, los supuestos falsos y sobre todo las contradicciones
pueden sugerir muchas hipótesis tanto falsas como verdaderas por lo que podría
no estar en contradicción directa con la evidencia empírica y aun así la teoría
sería completamente falsa, hemos de completar nuestra crítica mediante el análisis lógico pertinente; parafraseando a Nagel y Newman supongamos una fórmula tal que p → (¬p → q). Supongamos ahora que pudiera deducirse
de los axiomas alguna fórmula S juntamente con su contradictoria ¬S.
Sustituyendo p por S en el teorema y aplicando por dos veces la
regla de separación sería deducible la fórmula q. Pero si la fórmula que se
compone de la variable q es demostrable, se sigue inmediatamente que,
sustituyendo q por una fórmula cualquiera, cualquier fórmula es deducible de
los axiomas. Resulta así que si una fórmula S como ¬ S fuesen deducible de los axiomas, sería también deducible
cualquier otra fórmula. Si el cálculo no es consistente, toda fórmula es un
teorema, lo que equivale a decir que de un conjunto contradictorio de axiomas
puede ser derivada cualquier fórmula lo cual demuestra lo insuficiente lógicamente de las hipótesis de Friedman.
Otra de las afirmaciones de Espert es: “la economía positiva
nos dice que la imposición de un salario mínimo, si bien aumenta el ingreso de
quienes permanecen en el mercado laboral formal, genera desempleo (127) y/o un
aumento de las personas empleadas, de forma menos ventajosa, en el mercado
informal” hay países, como Suecia, en donde no hay salario mínimo pero se hacen
acuerdos colectivos y negociaciones entre trabajadores y empleadores donde el
estado protege el derecho a tener estas negociaciones colectivas. Hay muchas críticas empíricas a la visión de Espert: por ejemplo,
un estudio en USA mostró que los estados con salario mínimo tuvieron un efecto
positivo en el empleo http://www.fiscalpolicy.org/FPISmallBusinessMinWage.pdf
sobre los comercios de comida rápida en Pennsylvania un estudio mostró que no
hubieron negativos en el empleo debido al salario mínimo http://davidcard.berkeley.edu/papers/njmin-aer.pdf,
otro estudio muestra los beneficios de las personas de clase baja y señala el
hecho de los efectos positivos por encima de los negativos http://www.epi.org/publication/bp178/,
un meta-análisis muestra que es posible que los sesgos de publicación a la hora
de revisar estudios sobre el salario mínimo (que también muestra que estudios
nuevos no replicaron los mismos resultados) por lo que podría explicar los
estudios que muestran efectos negativos http://davidcard.berkeley.edu/papers/ts-min-wage.pdf,
otro habla sobre los sesgos de publicación y que dada la corrección de los
mismos no hay correlación entre salario mínimo y desempleo http://dx.doir.org/10.1111%2Fj.0950-0804.2005.00250.x,
en 1978 se mostraba que el 90% de los economistas pensaban que el salario
mínimo incrementaba el desempleo en los trabajadores no calificados, sobre la afirmación
de que el salario mínimo incrementa el desempleo entre los jóvenes y los
trabajadores no capacitados un 45,5% lo acepta, un 27,9% lo acepta con
condiciones, un 26,5% no lo acepta (http://www.tandfonline.com/doi/abs/10.1080/00220480309595230
otro estudio de 2006 muestra que un 46,8% quiere eliminar el salario mínimo, un
37,7% quiere subirlo y un 14,3% quiere mantenerlo. 7 premios nobel hicieron una
carta al congreso de USA pidiendo que aumenten el salario mínimo http://money.cnn.com/2014/01/14/news/economy/raising-minimum-wage/.
El economista Joseph Stiglitz dice esto acerca de la
escuela: “Los economistas de la escuela de Chicago (como Milton Friedman y
George Stigler), que creen en los mercados libres y sin trabas,
argumentaban que los mercados son intrínsecamente competitivos y que las
prácticas aparentemente anticompetitivas en realidad incrementan la eficiencia.”
A lo que el autor rebate con “Si la entrada en el mercado fuera fácil, la firma
dominante no ganaría nada echando a un rival, porque a la empresa que es
expulsada la sustituiría rápidamente otra. Pero en realidad la entrada no es
tan fácil, y las prácticas abusivas realmente se producen.” Esto es fácilmente ejemplificado
con la práctica de Windows frente a Netscape, Windows en sus primeros años
había logrado dominar el sector competitivo al que le concernía mientras que la
llegada del buscador Netscape competía con ellos a lo que la primera empresa
reaccionó dando gratis por unos años su buscador eliminando la competencia por
un tiempo relevante para sacar muchas ganancias, además Windows en los S.O. ha
logrado una gran cantidad de monopolización con un 90% del mercado, de hecho su
caso es estudiado en las teorías sobre monopolios, como bien se podrá ver, no
hubo intervención estatal en este caso. Pero citaré a Stiglitz para dar la
mayor relevancia empírica al caso
“la competencia funciona intrínsecamente en contra de la acumulación de
poder en el mercado. Cuando hay grandes beneficios monopolísticos, los
competidores trabajan para llevarse una parte. Ahí es donde entra en juego el
tercer factor que ha incrementado el poder monopolista en Estados Unidos: las
empresas han encontrado nuevas formas de dificultar la entrada de competidores,
de reducir las presiones de la competencia. Microsoft representa el ejemplo por
antonomasia. Dado que esa empresa prácticamente disfrutó del monopolio de los
sistemas operativos para ordenadores personales, corría el riesgo de perder
mucho dinero si aparecían tecnologías alternativas que socavaran su monopolio.
El desarrollo de Internet y del navegador de red para acceder a ella suponía una
amenaza de ese tipo. Netscape sacó el navegador al mercado, partiendo de la
investigación que había financiado el gobierno[163]. Microsoft decidió aplastar
a aquel competidor potencial. La empresa ofreció su propio producto, Internet
Explorer, pero el producto no era capaz de competir en el mercado libre.
Microsoft decidió utilizar su poder monopolista en los sistemas operativos para
PC para asegurarse de que el terreno de juego no estuviera nivelado. Desplegó
una estrategia denominada FUD (fear, uncertainty, doubt; miedo, incertidumbre y
duda, por sus siglas en inglés), que consistía en crear entre los usuarios una
cierta ansiedad respecto a la compatibilidad a base de programar mensajes de
error que aparecían aleatoriamente si se instalaba el navegador Netscape en un
ordenador con sistema Windows. Además, la empresa no aportó las revelaciones
necesarias para una plena compatibilidad a medida que se iban desarrollando
nuevas versiones de Windows. Y, en un alarde de astucia, ofrecía el navegador
Internet Explorer a un precio cero —gratis, integrado como componente de su
sistema operativo—. Es muy difícil competir con un precio igual a cero. Era evidente que vender algo a precio cero no era una estrategia
maximizadora de los beneficios a corto plazo. Pero Microsoft tenía una visión a
largo plazo: la conservación de su monopolio. Con ese fin, estaba dispuesta a
hacer sacrificios a corto plazo. Lo consiguió, pero sus métodos fueron tan
descarados que los juzgados y los tribunales de todo el mundo acusaron a la
empresa de dedicarse a prácticas anticompetitivas. Y sin embargo, al final,
Microsoft ganó porque se dio cuenta de que en una economía en red, una vez que
se logra una posición de monopolio, resulta difícil desmontarla. Teniendo en
cuenta su dominio del mercado de sistemas operativos, Microsoft tenía los incentivos
y la capacidad de dominar en una gran cantidad de aplicaciones de otros
tipos[165].
Así pues, no es de extrañar
que los beneficios de Microsoft hayan sido tan enormes —una media de 7.000
millones de dólares al año a lo largo del último cuarto de siglo, 14.000
millones durante los últimos diez años, que en 2011 aumentaron hasta los 23.000
millones de dólares[166]— y que quienes compraron sus acciones lo
suficientemente temprano hayan recogido los frutos. La opinión generalizada es
que a pesar de su posición dominante y de sus enormes recursos, Microsoft no ha
sido una empresa verdaderamente innovadora. No desarrolló el primer procesador
de texto que se utilizó de forma generalizada, ni la primera hoja de cálculo,
ni el primer navegador, ni el primer reproductor de material audiovisual, ni el
primer motor de búsqueda dominante. La innovación venía de otro lado. Eso es
coherente con las evidencias teóricas e históricas: los monopolistas no son
buenos innovadores[167].
Si echamos un vistazo a la
economía estadounidense, en muchos sectores observamos una gran cantidad de
empresas, y por consiguiente inferimos que debe de haber competencia. Pero eso
no siempre es cierto. Consideremos el ejemplo de los bancos. Aunque hay cientos
de bancos, los cuatro grandes se reparten entre ellos casi la mitad de los
activos bancarios del país[168], un sustancial aumento respecto al grado de
concentración que había hace quince años. En la mayoría de las poblaciones
pequeñas hay a lo sumo uno o dos bancos. Cuando la competencia es tan limitada,
es probable que los precios superen en gran medida los niveles
competitivos[169]. Por esa razón el sector goza de unos beneficios estimados
que superan los 115.000 millones de dólares anuales, una gran parte de los
cuales pasa a manos de sus máximos directivos y de otros banqueros,
contribuyendo a crear una de las principales fuentes de desigualdad en la parte
más alta[170]. En algunos productos, como los seguros por impago (credit
default swaps, CDS), que son productos financieros extrabursátiles, el mercado
está totalmente dominado por cuatro o cinco bancos muy grandes, y ese tipo de
concentración del mercado siempre suscita la preocupación de que estén
compinchados, aunque sea de forma tácita. (Pero a veces la connivencia ni siquiera
es tácita: es explícita. Los bancos establecen un tipo de interés fundamental,
denominado el LIBOR, acrónimo de London Interbank Offered Rate, que es un tipo
de interés interbancario. Las hipotecas y muchos productos financieros están
vinculados al LIBOR. Al parecer, los bancos actuaron para amañar el tipo de
interés, lo que les permitió ganar todavía más dinero de otros bancos que no
estaban al tanto de esos chanchullos).”
Lamento que el párrafo citado haya resultado tan largo pero
es una buena refutación de la escuela de Chicago desde la economía, también existen
pruebas empíricas aportadas por Richard Thaler que los economistas tienden a
ser menos empáticos y se distancian de la justicia “del pueblo”: mientras el 82
por ciento de los encuestados entre la población general consideraba injusto
aumentar el precio de las palas de nieve después de una ventisca, entre los
alumnos de su máster de Administración de Empresas tan solo el 24 por ciento
opinaba lo mismo. Hay pruebas de que la formación en económicas condiciona las
percepciones, y, teniendo en cuenta el papel cada vez mayor que han ido
teniendo los economistas en las políticas públicas, sus percepciones acerca de
lo que es justo y sus puntos de vista sobre la compensación entre equidad y
eficiencia pueden tener unas consecuencias desproporcionadas.
Otra de las cuestiones alegadas por Stiglitz es la obvia reticencia
a la evidencia empírica de Milton Friedman, Stiglitz dice y cito de nuevo:
“Recuerdo mis largas discusiones con él sobre las consecuencias de la
información imperfecta o sobre los mercados de riesgo incompletos; mis propios
trabajos y los de numerosos colegas habían demostrado que, en esas condiciones,
normalmente los mercados no funcionaban bien. Friedman sencillamente no era
capaz o no quería comprender esos resultados. No podía refutarlos. Se limitaba
a saber que tenían que ser erróneos. Friedman, y otros economistas del libre
mercado, tenían otras dos respuestas: aunque los resultados teóricos fueran
ciertos, eran «curiosidades», excepciones que confirmaban la regla; y aunque
los problemas fueran generalizados, no se podía confiar en que el gobierno los
resolviera.”
Podemos bien ver que los economistas de la escuela de
Chicago conocían información que los refutaba, pero sencillamente poseían un
sesgo de teoría que les impedía asimilar la refutación, un claro ejemplo de
pseudociencia sectaria. Los resultados de Friedman fueron principalmente con él
como asesor económico de Reagan en su primer gobierno donde el presidente se
dio cuenta pasados unos años que la política monetarista llevaba a la recesión a
lo que Milton respondió que las políticas implementadas no eran las
recomendadas (¡No era verdadero socialismo… Digo monetarismo!) sin un análisis teórico
real para dicha afirmación. Además algunas partes de las escuelas monetaristas
han defendido que los mercados se manejan de forma competitiva incluso cuando
solo una empresa mantiene un monopolio lo cual ha sido demostrado falso en
cualquier caso donde formen una empresa cuando existen costes sumergidos
(costes irrecuperables si una empresa entra en el negocio y posteriormente lo
abandona) (Joseph Farrell, «How Effective Is Potential Competition?», Economics
Letters, 20, n.° 1 (1986), pp 67 - 70; J. E. Stiglitz, «Technological Change,
Sunk Costs, and Competition», Brookings Papers on Economic Activity, 3 (1987),
pp. 883 - 947; y P. Dasgupta y J. E. Stiglitz, «Potential Competition, Actual
Competition, and Economic Welfare», European Economic Review, 32, n.° 2 - 3
(marzo de 1988), pp. 569 - 577.)
Hay que añadir además que la escuela de Chicago en Chile ha
generado desigualdades económicas gigantescas, ¿Y que hay de malo en ello?
Dirán los economistas, principalmente los problemas son que la psicología
social ha demostrado que la desigualdad económica relativa genera aumentos en
la cantidad de estrés que deviene en problemas de salud y desmejora la calidad
de vida de las personas, así un negro que viva en Estados Unidos gana 4 veces
más que alguien de Costa Rica pero aun así vive varios años menos y padece de
más estrés, además las sociedades más desiguales tienden a tener mayores cantidades
de criminalidad (predicho por las teorías del comportamiento antisocial de la
criminología sociológica) y varios problemas de índole social, esto no quiere
decir que un país deba buscar únicamente la igualdad debido a que desigualdades
por mérito son totalmente deseables así como igualdad de miseria es algo que
nadie va a buscar, una igualdad absoluta solo podría venir de regímenes tiránicos
pero una desigualdad relativa genera muchos problemas indeseables. Para citar un estudio cabe mencionar que después de estudiar 155 artículos sobre la relación entre
salud e ingresos en áreas (o grupos) de tamaño diverso, Wilkinson y Pickett
(2006) concluyeron que el principal determinante de la salud no es tanto el
ingreso absoluto como la desigualdad en los ingresos. En resumidas cuentas, la
desigualdad social es «enfermante». Un bajo estatus social es estresante (eleva
los niveles de corticoides) porque reduce el control de las personas (y de
otros animales sociales) sobre sus vidas. Además, las lleva a hacer cosas fuera
de lo común para estar al nivel del vecino, vale decir para mantener o mejorar
su estatus y provocar respeto, desde alardear de proezas sexuales y simular
virtudes, hasta robar e involucrarse en peleas en las que puedan vencer. En
resumen, la epidemiología ha refutado el dogma de que el «desarrollo» económico
(con lo que quieren decir «crecimiento del PIB») y el correlativo incremento
del ingreso per cápita es necesario y suficiente para resolver los problemas
sociales. En realidad, la igualdad económica es al menos tan importante como el
ingreso absoluto. Vale decir, la igualdad en cuestión sería matizada. Igualdad
de recursos (u oportunidades) junto con obligaciones que guarden proporción con
las capacidades personales.
Los defensores de la escuela de Chicago tienden a defender
los aumentos del PBI sobre todas las cosas, parecen ignorar que es un lugar
común el que el PBI aumenta la desigualdad relativa de las sociedades así como
que no mide la distribución real de la riqueza, solo estima un promedio en base
a la riqueza total.
En palabras de Milei “La evidencia empírica está a favor de
la economía ortodoxa” aquí hemos podido ver como la evidencia empírica completamente
está en favor de esto (nótese el sarcasmo) pero para tratar de finiquitar el
asunto voy a tomar en cuenta los mayores errores de esta economía en materia psicológica,
el libro primordial que plantea las bases y supuestos psicológicos de la economía
ortodoxa de Bruno Frey dice en su primer párrafo: “El agente de la teoría económica
es racional y egoísta, y sus gustos no cambian.” Esto llevó al jurista
y experto en psicología Sunstein a denominar “econos” a los sujetos estudiados
por la teoría económica y “humanos” a los sujetos estudiados por la psicología cognitiva-conductual,
“los
humanos que los psicólogos conocen tienen un sistema 1, su visión del mundo se
halla limitada por la información que disponen en un momento dado por lo que no
pueden ser consistentes y lógicos como los econos. En ocasiones son generosos,
y a menudo están dispuestos a aportar algo al grupo al que están adscritos” en
palabras del premio nobel en economía Daniel Kahneman, el principal teórico de
la teoría ortodoxa del comportamiento humano es Bernoulli quien afirmaba que el
valor psicológico del dinero (utilidad) y la cantidad real del mismo estaban en
correlación, alguien con un capital de 100 ducados que recibe un obsequio de 10
ducados posee el mismo valor psicológico que el equivalente de 20 ducados a
alguien que posee 200 ducados, el ejemplo que utiliza Kahneman para demostrar
lo que esta teoría ignora es el siguiente:
“Hoy, Jack y Jill tienen 5 millones cada uno
Ayer, Jack tenía 1 millón y Jill 9 millones
¿Están igual de felices? (¿Disfrutan de la misma utilidad?)”
La teoría de Bernoulli afirmaría que lo que hace a los
individuos felices es la utilidad de su riqueza y Jack y Jill tienen la misma
fortuna por lo que la teoría presupone que ambos estarían igual de felices, no
hay que tener un master en psicología para saber que esto es fácilmente falsado.
Supongamos otro ejemplo
Anthony posee 1 millón
Betty posee actualmente 4 millones
Se ofrece a ambos elegir un juego y dinero seguro
El juego: las mismas posibilidades de terminar ganando 1
millón o 4 millones de capital total
El dinero seguro: 2 millones de capital neto total
La riqueza esperada será de 2,5 millones si aceptan el
juego, y de 2 millones si prefieren la opción del dinero seguro. Bernoully
habría esperado que Anthony y Betty hicieran la misma elección pero esta predicción
es falsa. Anthony se hubiese ido hacia la apuesta de dinero seguro que le
aseguran dos millones de dólares por el fenómeno psicológico entendido como aversión
a la perdida (por ejemplo, muchas personas no aceptarían un juego donde por
lanzar una moneda ganasen 150 dólares o perdiesen 100 dólares y muchas otras
evidencias que no viene a cuento nombrar) mientras que Betty ante la
posibilidad de la perdida inminente se hubiese ido por el efecto de que ante la
pérdida los seres humanos tienden a aceptar y buscar el riesgo (esto se utiliza
en empresas con mucho éxito para saber cuándo despedir a los empresarios además
de que se ha investigado las respuestas de personas ante la perdida y los
resultados favorecen esta hipótesis) estos errores sistemáticos en la explicación
de la conducta humana han llevado a la teoría de las perspectivas en donde se
utiliza como referente un punto de referencia inicial y se suponen las
respuestas en base a este punto con una mucha mayor aversión a la perdida que a
la ganancia. Esta teoría ha sido aceptada gradualmente cada vez más en economía,
aunque también tiene errores debido a que no toma en cuenta los puntos de
referencia y su impacto psicológico, se los toma a todos como iguales, y también
se olvida los efectos en las decisiones que tienen el arrepentimiento y la
responsabilidad. Además, Matthew Rabin probó matemáticamente que los intentos
de explicar la aversión a la pérdida por la utilidad del patrimonio son
absurdos y están condenados al fracaso: Rabin
propone un juego “50 por ciento de posibilidades de perder 100 dólares y
50 por ciento de posibilidades de ganar 200 dólares” para pasar a demostrar matemáticamente
que según la teoría de la utilidad, un individuo que rechace este juego también
rechazará este otro juego “50 por ciento de posibilidades de perder 200 dólares
y 50 por ciento de posibilidades de ganar 20.000 dólares” ustedes juzguen.
Otro de los supuestos de la teoría económica es que los
gustos de los seres humanos son inalterables, la psicología también ha refutado
que suponiendo los casos de Albert y Brian en donde Albert y Brian tienen dos
opciones: A) un trabajo con 10.000 dólares más o B) un trabajo donde se gana normal,
pero con 12 días extras de vacaciones. Supongamos que Albert y Brian les da
igual y lo dejan a la suerte. A lo que Albert saca A, supongamos que Albert toma
en cuenta la posibilidad de cambiar a B; En caso de permanecer en A ni gana ni
pierde nada, en caso de ir a B gana 12 días extras de vacaciones y un recorte
salarial de 10.000 dólares al año, en este caso la visión de Albert se verá
cambiada debido al nuevo punto de referencia y es plausible que él prefiera
quedarse en A a la vista de que por ir a B pierde y la aversión a la perdida lo
mantendrá en A. Los gustos de los seres humanos, a diferencia de los gustos de
los econos, no son inalterables y varían dependiendo del punto de referencia
además las desventajas de un cambio pesan más que las ventajas debido a un
sesgo que favorece el statu quo, obviamente esto no implica que la aversión al
riesgo mantenga a las personas en contra de todo cambio, únicamente que para evaluar
por lo general se toma en cuenta el punto de referencia y las desventajas por
sobre las ventajas, si las ventajas sobrepasan en demasía las desventajas se
tomará el cambio. Esto ha sido demostrado experimentalmente y se lo conoce como
“efecto dotación” se les dio a unas personas una taza valorada en 6 dólares a
unos sujetos experimentales para que sean vendedores, fuera de eso se puso a unos
vendedores que se les dio el dinero que valía la tasa en billetes y unos
observadores independientes que valorasen las tazas, el valor medio otorgado a
las tasas fue de 7,12 dólares en vendedores, 3,12 dólares para los
independientes y 2,87 dólares los compradores demostrando que los vendedores
por lo usual subían el precio alto debido a que tenían intenciones de usar esa
tasa (a diferencia de los vendedores que tienen un producto para intercambiarlo
por dinero, los bienes destinados a uso suelen generar estos efectos y hay
muchísimas más pruebas que lo corroboran, únicamente cito esta por cuestión de
espacio) además estos valores dependían de las culturas y su relación entre el
comercio y el dinero (existen diferencias observables entre USA y UK) y como comprobación
de las conclusiones los experimentadores propusieron a todos los grupos “pensar
como comerciantes” a lo que se tuvo una respuesta positiva que bajó
considerablemente los precios a valores reales.
Además, como ya se ha citado a Thaler, hay muchas
influencias en lo que las personas consideran justo en el mercado con sus
compras, acciones y demás, a diferencia de lo que la economía ortodoxa podría
predecir, las personas no se comportan de forma egoísta sino que son capaces de
afectar el mercado por términos de que consideran que una empresa obró de
manera injusta, esto ha sido probado en Erns Fehr, Lorenz Goette y Christian
Zehnder “A Behavioral Account of the labor Market: The role of fairnes concerns”
Annual review of economics (2009).
Se han hecho otros experimentos del tipo
La urna A contiene 10 bolas, de las cuales una es roja
La urna B contiene 100 bolas, de las cuales 8 son rojas
¿Qué urna elegir? Entre un 30 y 40 por ciento de los
estudiantes eligieron la urna con el mayor número de bolas rojas en lugar de
elegir la urna que ofrece una mayor posibilidad de ganar violando varias reglas de racionalidad. Los resultados muestran la manera superficial de procesar características del
sistema 1, a lo que se llama “olvido del denominador”. Está claro mencionar que
los estudiantes universitarios sabían acerca de porcentaje y estadística antes
de hacer su decisión.
Además los seres humanos tienden a estar sugestionados por
el marco en el que se proporciona una evidencia, véase
Decisión (i): elegir entre
A)
Ganar con seguridad 240 Dólares
B)
25 por ciento de posibilidades de ganar 1.000
dólares y 75 por ciento de posibilidades de no ganar nada
Decisión (ii) elegir entre:
C)
Pérdida segura de 750 dólares
D)
75 por ciento de posibilidades de perder 1.000
dólares y 25 por ciento de no perder nada
Ahora analicemos otra cosa
AD) 25 por ciento de posibilidades de ganar 240 dólares y 75
por ciento de posibilidades de perder 760 dólares
BC) 25 por ciento de posibilidades de ganar 250 dólares y 75
por ciento de posibilidades de perder 750 dólares
La opción BC es mejor que la AD pero la opción AD es la combinación
de las dos rechazadas en el primer par de problemas de decisión, la que solo el
3 por ciento de los participantes prefirieron en el estudio original, la opción
inferior AD fue preferida por el 73 por ciento de los participantes. Y esta no
es la única prueba acerca de la relevancia del marco, se han encontrado exámenes
parecidos cuando a médicos se les dice que “X tratamiento tiene un 90% de
efectividad en salvar a un paciente” es recibido mucho más positivamente que “X
tratamiento tiene 10% de mortandad” siendo que ambos son lógicamente equivalentes
el único problema es el del marco donde se utiliza.
Los humanos también tienden a hacer revocaciones, por
ejemplo
Se le ofrece elegir entre dos apuestas que resolverá una
ruleta con 36 números
Apuesta A: 11/36 de ganar 160 dólares, 25/36 de perder 15
dólares
Apuesta B: 35/36 de ganar 40 dólares, 1/36 de perder 10
dólares
Se les pidió a los economistas que dijeran que apuesta
preferían a lo que la mayoría contestó que elegirían la apuesta B mientras que
cuando se les preguntó que si tuvieran que vender una apuesta cuál valorarían
más eligieron la A dando una clara revocación, se les daba en primer lugar más
valor a B por la aversión al riesgo pero se consideraba más valiosa a A dando
lugar a un sesgo que un agente racional no tendría al que los psicólogos denominan
“revocación de preferencia”
No hay que ignorar la influencia que las hipótesis erróneas acerca
del comportamiento humano tienen en los economistas de la escuela de Chicago,
los humanos no están bien descritos en el modelo de agente racional, a menudo
necesitan ayuda para hacer juicios más acertados y tomar mejores decisiones, y
en algunos casos, las políticas y las instituciones pueden proporcionar esa
ayuda de manera no intrusiva. La fe en la racionalidad humana acaba por tomar
como inmoral el proteger a las personas contra sus propias elecciones, las
personas racionales deben ser libres y responsables del cuidado de sí mismas.
Para cualquiera que acepte las evidencias “la libertad tiene un coste que soportan los
individuos que hacen malas decisiones y la sociedad se siente obligada a
ayudarlos, la decisión de proteger o no a los individuos contra los errores constituye
un problema para los economistas conductuales” mientras que la escuela
de Chicago pasa olímpicamente de ese problema ético al ignorarlo en su teoría
ortodoxa. Además, la escuela de Chicago no toma en consideración la protección de
las personas de los abusos empresariales que podrían hacerse abusando de la psicología
cognitiva, lo que forzaría a todos los ciudadanos del mundo a conocer los ultimos avances de psicología, reconocer completamente cualquier sesgo y estar alerta en cada momento de su vida (cosa prácticamente
imposible debido a la condición del sistema 1 y 2, o sea, la maquinaria
cognoscitiva en general favorece las intuiciones y, con ésta, los sesgos del
juicio) una empresa inescrupulosa podría aprovechar todo esto para estafar a
millones haciendo que la empresa más ganadora incluso no haya dado nada a
cambio a sus consumidores.
Es por tanto menester que los legos que quieren
formarse en economía vayan con cuidado entre las minas de fuego
pseudocientifico que pueden pisar mientras caminan por el campo del pensamiento
económico, sobre todo, la desactualizada e infértil escuela de Chicago.Revisión: He dejado atrás algunos fenómenos que me parecen de vital importancia como por ejemplo el efecto priming que consiste en la capacidad de el sistema intuitivo humano de empezar a generar asociaciones mediante la memoria y un estímulo tan pequeño como una simple palabra, de hecho según estudios el solo hecho de leer la palabra "VIEJO" genera que las personas caminen más lento e incluso puede hacerse con palabras que generen o incluyan dentro de viejo como "JUBILACIÓN" de este hecho se desprende que el oler una linda brisa de verano estemos más dispuestos a aceptar algo que a rechazarlo. Además existe el efecto halo donde de una propiedad positiva de un individuo asociamos que todas sus cualidades son positivas, este efecto cognoscitivo genera cosas muy raras e incluso perturbadoras como el que las personas reciben información sobre los beneficios de algo crean, sin evidencia, que es más seguro que sus alternativas y que las personas que recibieron información sobre la seguridad de algo crean, sin evidencia tampoco, que es más beneficioso.
¿Entonces que escuela propones? ¿la neokeynesiana?
ResponderBorrarNo estoy tan informado de ello como para afirmar algo, únicamente la escuela de Chicago es pseudociencia, la evidencia empírica lo demuestra. Es como que en mi blog acerca de la pseudociencia del psicoanálisis alguien dijera: Ah ¿Pero si no es psicoanálisis que es?. La economía es una materia embrionaria donde muchas afirmaciones categóricas no pueden hacerse, tampoco así planeo estudiarla a fondo, lo único que hago es ir por varios puntos refutando lo que hay.
BorrarCreer que se contrasta una escuela entera que ocupa libros y libros con este texto me parece un tanto ridiculo. Mas alla de eso, y tomando el tema del salario mínimo se nota que en Venezuela el salario mínimo hizo mas bien que mal eh. El salario mínimo si significa desempleo, es como una regulación, si yo prohíbo el mercado de las drogas con una regulación destruyo empleo (mas alla de que prohibirlo este bien o mal, ese no es el punto). Es una regulación mas, que depende del caso es perjudicial o no. Ademas, ¿como medís si es perjudicial o no? el salario mínimo genera un tope al que hay que llegar para valer como trabajador, si no llegas a este no vas a ser contratado, una persona sin experiencia que la necesite posiblemente se vea perjudicada con el salario mínimo, o sea no va a ser contratada y este daño no va ser tomado por la estadística porque no llega el dato. También, es curioso que hables de monopolios, la escuela de Chicago es de liberales clasiscos en su mayoría siempre van a estar en contra de los monopolios porque saben el daño que causan. Tomando el tema de la desigualdad quiero decirte que lo que importa de verdad es si la gente puede cumplir sus necesidades al igual que la persona rica, ¿a que me refiero? da igual si el rico tiene una cancha de tenis privada, la persona común puede alquilar una cancha de tenis, con lo cual satisface su necesidad. El negro que sufre estrés lo esta sufriendo por su propia decisión, no por la desigualdad, el tipo gana ese salario porque se parte el culo de ahí el estrés, no entiendo como lo relacionas con la desigualdad. La libertad conlleva responsabilidad, alguien que no tiene esa responsabilidad no tiene porque ser atendido a menos que se vuelva un problema para la mayoría, un borracho que termino en la calle por tomar mucho dada su adicción no amerita cortar las libertades de los demás para ayudarlo, si esa persona no fue responsable los demás no tienen que pagar por ello.
ResponderBorrarEso es lo único que tengo que decir sobre tu texto, por lo demás me pareció un trabajo bastante bueno y me hiciste dudar sobre ciertos temas.
"Creer que se contrasta una escuela entera que ocupa libros y libros con este texto me parece un tanto ridiculo."
BorrarBueno, si te parece que haga un blog refutando todos y cada uno de los puntos erróneos de cualquier pseudociencia me parece un tanto ridículo, toda pseudociencia tiene una doctrina que es más o menos fácil de aprenderse pero en economía las cosas son más complicadas debido a la enorme cantidad de maquillaje matemático que tienen las peores pseudociencias, lo que hice fue tomar los aportes más emblemáticos de una escuela y hacerlos golpearse con los hechos, cosas como "Los mercados son intrínsecamente competitivos", la epistemología general de Friedman y su forma de plantear teorías económicas y su base general microeconomica, así también con el psicoanalisis o la sociobiología no agarro un libro completo y lo refuto punto por punto hasta las más pequeñas minucias tampoco parece menester hacerlo aquí
"El salario mínimo si significa desempleo"
¿Podría por favor pasar a refutar todas y cada una de las fuentes que he pasado? Eso fue una broma, de todas formas tú puedes ver por ti mismo toda la literatura que existe en favor de la hipótesis que defiendo.
"Se nota que en Venezuela el salario mínimo hizo más bien que mal eh"
Pues yo no acacharía todos los problemas económicos de Venezuela al salario mínimo sin evidencia alguna, pero como cabe aclarar, no, no creo que el darles a los trabajadores un salario mínimo haya generado tantos problemas en Venezuela ahora, ¿La inexistencia de un salario mínimo sin un estado que permitiese los sindicatos como fue en la revolución industrial? Me parece que existe mucha data que demuestra que los trabajadores en esas condiciones padecían de desnutrición grave y vivían menos.
"el salario mínimo genera un tope al que hay que llegar para valer como trabajador, si no llegas a este no vas a ser contratado, una persona sin experiencia que la necesite posiblemente se vea perjudicada con el salario mínimo, o sea no va a ser contratada y este daño no va ser tomado por la estadística porque no llega el dato."
Borrar¿O sea que las estadísticas que miden la cantidad de desempleo en relación con las medidas del salario mínimo no miden el desempleo porque "no llega al dato"? ¿Y qué es "No llegar al dato"?
"También, es curioso que hables de monopolios, la escuela de Chicago es de liberales clasiscos en su mayoría siempre van a estar en contra de los monopolios porque saben el daño que causan."
Los esclavistas abogaban por la libertad (la libertad de tener como propiedad privada lo que quisieran), los ideales que se contradigan con la práctica existen desde hace mucho, que existe evidencia empírica que demuestra que las políticas económicas de Friedman llevan al monopolio y posible reseción económica no tiene nada que ver con las creencias de Friedman ¿O yo debería afirmar que el anarquismo no genera caso social porque sus ideales van en contra de dicho caos?
"Tomando el tema de la desigualdad quiero decirte que lo que importa de verdad es si la gente puede cumplir sus necesidades al igual que la persona rica"
Exactamente en el caso de Chile ese no es el caso, muchas personas no tienen ni gas fuera de la capital.
"El negro que sufre estrés lo esta sufriendo por su propia decisión, no por la desigualdad, el tipo gana ese salario porque se parte el culo de ahí el estrés, no entiendo como lo relacionas con la desigualdad."
¿Por qué existe evidencia empírica, experimentos controlados y una teoría entera que saca esas conclusiones? Digo, es un inicio...
"a libertad conlleva responsabilidad, alguien que no tiene esa responsabilidad no tiene porque ser atendido a menos que se vuelva un problema para la mayoría, un borracho que termino en la calle por tomar mucho dada su adicción no amerita cortar las libertades de los demás para ayudarlo, si esa persona no fue responsable los demás no tienen que pagar por ello. "
Obviamente la libertad implica responsabilidad pero el conocer el problema que puede existir por dejar a su suerte a las personas es algo que la escuela de Chicago pasa por alto, las soluciones a estos problemas éticos deben ser resueltas por sociólogos y economistas pero no pueden serlo sin ayuda. Además una sociedad con muchos borrachos empedernidos puede terminar gravemente, tampoco es cosa de hacerlos dejar la bebida así como controlar la comida para que no hayan gordos, pero sí que el estado podría apoyar la existencia de ayudas (que pueden ser privadas o públicas) para personas que quieran salir de esa situación, campañas de concientización social y proponer activamente a las personas a estas soluciones, tampoco es una intrusividad del tipo gran hermano pero no vamos a ir por dejarlos totalmente a su suerte y a suerte de las licorerías, vendedores de comidas saturadas y publicistas ingeniosos que se aprovechen de las debilidades cognitivas propias de la mayoría de seres humanos.
"por lo demás me pareció un trabajo bastante bueno y me hiciste dudar sobre ciertos temas."
Me alegra, es mi trabajo :)
Gracias por comentar!!!!
¿No fue la Revolución Industrial la que acabó con la esclavitud ya que era conveniente tener gente a sueldo y no esclavos?
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